El Origen y Repercusiones del Pendejismo

El pendejismo es un fenómeno mental el cual la persona no sabe que tiene conciencia de que lo tiene, sino que piensa que todo está bien porque así es que fue, es y será por siempre. Este fenómeno fue creado por varios sectores de la sociedad, entre las cuales están: ciertos estilos educativos, la religión, los medios de comunicación y el gobierno. Hablemos de la educación, donde la mayoría es información de botella y el análisis de las situaciones o problemas es casi un mito. Esta es la manera más fácil y rápida para cumplir con todo el prontuario, sí, esa es la excusa de algunos maestros. Ya desde pequeños se van creando niños con el fenómeno del pendejismo, niños que no cuestionen nada, es lo que dice en el libro y punto. Hablemos de la religión, un área en donde tampoco se puede cuestionar. No se diferencia tanto de la escuela, tampoco se puede cuestionar al libro, es lo que dice ahí y ya. Hablemos de los medios de comunicación, la manera en que manipula las noticias e información con tal de contribuir al fenómeno del pendejismo y mantener a las personas en ese estado. A los medios no les importa si lo que publican es cierto o no, lo que les importa es que la mayoría, al menos, les crean. Con lograr eso, tienen quienes los defiendan en la calle. Por último y no menos culpable, hablemos del gobierno, es el líder de esparcir este fenómeno del pendejismo por el pueblo. Son ellos los que dicen cómo la juventud se debe educar, cómo y en qué las personas deben creer, y cómo y qué las personas deben saber la información. El gobierno, al igual que los medios de comunicación, tiene una masa de pendejos que los respaldan, que los justifican y les aplaude cada decisión que toman sin importar si les afecta o no al pueblo. Los sectores más importantes de la sociedad buscan que sus participantes no razonen ni cuestionen porque es más fácil dominar un pueblo sumiso que un pueblo pensante. El pendejismo es parte de una masa que no quiere la cura por miedo a ser diferente al resto, por miedo a saber la verdad y por miedo al cambio. Admiro a ese maestro que se sale de línea y busca que sus estudiantes razonen sobre las situaciones o problemas que se les plantean. Es un maestro inmune al pendejismo y les está dando la cura a sus estudiantes, en un futuro se lo agradecerán. Admiro a ese líder de misa que tiene una mente abierta ante las diferencias racionales y de orientación sexual. Admiro a esas personas que no se dejan engañar por los medios de comunicación y aquellas personas que transmiten la información como debe ser, sin necesidad de la manipulación para caerle bien a la mayoría. Admiro a todo aquel que se indigna, protesta, cuestiona y no se deja dominar por las decisiones tomadas en el gobierno sin transparencia de los detalles porque solo los beneficia a ellos, ¿y el pueblo?, pues que se joda. Basta ya del pendejismo, abre esos ojos, despierta ese cerebro y abre esa boca. Ese es el orden, observa, analiza y habla. Notarás a los que tienen el fenómeno del pendejismo porque observan y no hablan o hablan sin haber analizado. Pendiente a esas personas y ayúdalas, mientras menos pendejos, más seres racionales seremos en el país. Espero empezar a curar con este escrito.